Eucaristía del Martes 24 de Septiembre de 2024
Martes de la vigesimoquinta semana del tiempo ordinario
Nuestra Señora de la Merced
Memoria libre
Color: blanco
Antífona de entrada Cf. Jdt 13, 18. 19
El Señor, el Dios altísimo, te ha bendecido a ti, Virgen María, más que a todas las mujeres de la tierra. Él ha engrandecido tanto tu nombre, que los hombres no dejarán de alabarte.
ORACIÓN COLECTA
Padre misericordioso, que otorgaste la redención a los hombres por medio de tu Hijo, concede, a cuantos invocamos a su Madre con el título de la Merced, mantenernos en la verdadera libertad de hijos, que Jesucristo nos mereció con su sacrificio, y ofrecerla incansablemente a todos los hombres. Él que vive y reina contigo en la unidad del Espíritu Santo, y es Dios, por los siglos de los siglos.
PRIMERA LECTURA
Diversas sentencias.
Lectura del libro de los Proverbios 21, 1-6. 10-13
El corazón del rey es una corriente de agua en manos del Señor:
Él lo dirige hacia donde quiere.
Al hombre le parece que todo su camino es recto, pero el Señor pesa los corazones.
Practicar la justicia y el derecho agrada al Señor más que los sacrificios.
Los ojos altaneros, el corazón arrogante, la luz de los malvados: todo eso es pecado.
Los proyectos del hombre laborioso son pura ganancia, el que se precipita acaba en la indigencia.
Tesoros adquiridos con engaños son ilusión fugaz de los que buscan la muerte.
El alma del malvado desea el mal, él no se apiada de su prójimo.
El simple se hace sabio cuando se castiga al insolente, y asimila la ciencia cuando se instruye al sabio.
El justo observa la casa del malvado y precipita en la desgracia a los malos.
El que cierra los oídos al clamor del débil llamará y no se le responderá.
SALMO RESPONSORIAL 118, 1. 27. 30. 34-35. 44
R/. ¡Condúceme por la senda de tus mandamientos, Señor!
Felices los que van por un camino intachable, los que siguen la ley del Señor.
Instrúyeme en el camino de tus leyes, y yo meditaré tus maravillas.
Elegí el camino de la verdad, Puse tus decretos delante de mí. Instrúyeme, para que observe tu ley y la cumpla de todo corazón.
Condúceme por la senda de tus mandamientos, porque en ella tengo puesta mi alegría. Yo cumpliré fielmente tu ley: lo haré siempre, eternamente.
ACLAMACIÓN AL EVANGELIO Lc 11, 28
Aleluya.
Felices los que escuchan la Palabra de Dios y la practican. Aleluya.
EVANGELIO
Mi madre y mis hermanos son los que escuchan la Palabra de Dios y la practican.
+ Evangelio de nuestro Señor Jesucristo según san Lucas 8, 19-21
La madre y los hermanos de Jesús fueron a verlo, pero no pudieron acercarse a causa de la multitud. Entonces le anunciaron a Jesús: “Tu madre y tus hermanos están ahí afuera y quieren verte”. Pero Él les respondió: “Mi madre y mis hermanos son los que escuchan la Palabra de Dios y la practican”.