Eucaristía del Lunes 25 de Noviembre de 2024
Lunes de la trigésimo cuarta semana del tiempo ordinario
Santa Catalina de Alejandría, virgen y mártir
Memoria libre
Color: rojo
Su vida está enmarcada en el siglo IV, en tiempos del imperio de Majencio. Se la presenta como una joven perteneciente a una familia noble de Alejandría y de gran inteligencia. Versada en conocimientos filosóficos de la época y buscadora incansable de la verdad. Movida por la fe cristiana, se bautiza.
Dotada de aguda sabiduría y fortaleza de ánimo. Enfrentada con los sabios del imperio, descubre sus sofismas e incluso se convierten después de la dialéctica bizantina. Aparece como vencedora en la palestra de la razón y vencida por la fuerza de las armas en el martirio.
Su cuerpo descansa en el célebre cenobio del monte Sinaí, donde recibe piadosa veneración
Antífona de entrada
Sigue al Cordero crucificado por nosotros, la virgen valiente, ofrenda de pureza y castidad.
ORACIÓN COLECTA
Dios todopoderoso y eterno, que diste a tu pueblo el testimonio del martirio de Santa Catalina, virgen, por su intercesión, fortalece nuestra fe y constancia y concédenos trabajar generosamente por la unidad de la Iglesia. Por nuestro Señor Jesucristo, tu Hijo, que vive y reina contigo en la unidad del Espíritu Santo, y es Dios, por los siglos de los siglos.
PRIMERA LECTURA
Los elegidos tenían escrito en la frente el nombre del Cordero y de su Padre.
Lectura del libro del Apocalipsis 14, 1-3. 4b-5
Yo, Juan, vi al Cordero que estaba de pie sobre el monte Sión, acompañado de ciento cuarenta y cuatro mil elegidos, que tenían escrito en la frente el nombre del Cordero y de su Padre.
Oí entonces una voz que venía del cielo, semejante al estrépito de un torrente y al ruido de un fuerte trueno, y esa voz era como un concierto de arpas: los elegidos cantaban un canto nuevo delante del trono de Dios, y delante de los cuatro Seres Vivientes y de los Ancianos. Y nadie podía aprender este himno, sino los ciento cuarenta y cuatro mil que habían sido rescatados de la tierra.
Ellos siguen al Cordero donde quiera que vaya. Han sido los primeros hombres rescatados para Dios y para el Cordero. En su boca nunca hubo mentira y son inmaculados.
SALMO RESPONSORIAL 23, 1-4b. 5-6
R/. ¡Benditos los que buscan tu rostro, Señor!
Del Señor es la tierra y todo lo que hay en ella, el mundo y todos sus habitantes, porque Él la fundó sobre los mares, Él la afirmó sobre las corrientes del océano.
¿Quién podrá subir a la Montaña del Señor y permanecer en su recinto sagrado?
El que tiene las manos limpias y puro el corazón: el que no rinde culto a los ídolos ni jura falsamente.
Él recibirá la bendición del Señor, la recompensa de Dios, su salvador. Así son los que buscan al Señor, los que buscan tu rostro, Dios de Jacob.
ACLAMACIÓN AL EVANGELIO Mt 24, 42a. 44
Aleluya.
Estén prevenidos y preparados, porque el Hijo del hombre vendrá a la hora menos pensada. Aleluya.
EVANGELIO
Jesús vio una viuda de condición muy humilde que ponía dos pequeñas monedas de cobre.
+ Evangelio de nuestro Señor Jesucristo según san Lucas 21, 1-4
Levantando los ojos, Jesús vio a unos ricos que ponían sus ofrendas en el tesoro del Templo. Vio también a una viuda de condición muy humilde, que ponía dos pequeñas monedas de cobre, y dijo: “Les aseguro que esta pobre viuda ha dado más que nadie. Porque todos los demás dieron como ofrenda algo de lo que les sobraba, pero ella, de su indigencia, dio todo lo que tenía para vivir”.